Michel Polac es un periodista y ex presentador de televisión con una marcada tendencia pasquinera. Al parecer tenía un programa en la TV francesa en la que promovía-provocaba los debates pero un día se fue de madre al denunciar los turbios negocios de una compañia inmobiliaria.
En el artículo de M. Polac que Nuria nos envió –duly translated y correctamente encomado y punteado- Polac no habla de un muerto sino de los casi 500 mil muertos anuales en Francia or rather del negocio alrededor de ese medio million de « clientes ».
Al parecer la Revolución Francesa llevó algunos cambios a la Francia de los reyes empelucados y despues de varios Napoleones allá por el 1904 prevaleció el espiritu laico e igualitario ante la muerte y promovieron una ley que aseguraba hasta al más pauperrimo de los aldeanos que tendría un entierro com Dios manda. Pero pronto los mercaderes de los cajones de pino se juntaron y crearon las « Pompes funebres Generales » que desde entonces se lleva la parte del león en materia de cadaveres a enterrar and therefore impone sus precios a las atribuladas viudas y doloridos familiares del difunto.
Actualmente la « Pompas Funebres Generales » pertenece a la poderosísima « Societe Lyonnaise des Eaux »[ Lo que no tiene nada de extraordinario si tenemos en cuenta que la cultísima editorial Hachetter fabrica el letal mísil Matras ]
Eso es una prueba más que así como a Carlitos Marx todo lo relacionado con el ser humano le interesaba para los capitalistas todo lo que pueda dar ganancias es apto a explotación en aras del profit making. Se dice que en un sistema socialista el Estado se ocupa del individuo desde la cuna a la sepultura y lo mismo sucede en un sistema capitalista con la diferencia que en este último se ocupa del individuo…siempre y cuando sea rentable. Y como en algún rincón del alma donde guardamos los recuerdos que nos dejó su amor seguimos pensando que ni la educacion,ni la salud, ni la sepultura deben ser un motivo de ganancias no podemos ser capitalistas. As simple as that
El Pasquin de Radio Bemba
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