le dijo estas palabras: en la grosura de la tierra y el rocío
que cae del cielo será tu bendición. Vivirás de tu espada
y servirás a tu hermano: pero llegará tiempo en que
sacudirás su yugo, y librarás de él tu cerviz”
(Génesis. Cap. 27, versículos 38 a 40)
CONTENIDO
1. Política nacional de lacayos 1
2. Amenazas auténticas a la Vida 3
3. Balbuceos de materialismo histórico 4
4. Lacayos ejemplares 5
5. Desafío mundial de sionistas 6
1. Política nacional de lacayos
Uribe Vélez está enfermo por el poder desde chiquito, como él, su
familia y sus círculos íntimos lo saben y reconocen, atribuyéndolo a
disposición divina y vocación irrenunciable. Hasta por History
Channel, la que dice que “tu tiempo es ahora”, le han hecho eco a la
soberbia de estos capos con complejos de redentores y almas de
demonios.
Al menos, en su cinismo desvergonzado los miembros de las clases
emergentes y sus simpatizantes pretenden que los tratemos como
salvadores providenciales, pues nos consideran tan moral e
ideológicamente atrasados como el combo criminal de los Ochoa, del
cual Alvarito y su carnal José Obdulio hacen parte, como portentos de
sabiduría dignos de ocupar la primera línea.
Junto a Mario Uribe Escobar (y a una jauría de intelectuales oscuros,
frustrados en la academia y convencidos de que con Uribe alcanzarían
las cúpulas sociales que la oligarquía tradicional reservaba para sus
vástagos) conforman el frente intelectual capaz de intentar romper
política y socialmente la brecha entre las oligarquías tradicionales
de la “Atenas suramericana”, tan cultas pero de quienes se burlaba
Rubén Darío, y las clases emergentes, semi analfabetas por culpa de la
ruinosa y abyecta gestión de aquellas durante 200 años.
Por desgracia, las tradicionales siguen basando su superioridad en la
ignorancia generalizada. Y Santos lo corroborará, sin lugar a dudas,
pues sabe que la educación es subversiva.
Por eso trató de privar a los paisas de la Biblioteca Pública Piloto,
cuando fue ministro de Pastranita, sin importarle que fuese un
proyecto piloto a nivel mundial, financiado por la UNESCO para darles
una manito a los pueblos, tan ricos en genios capaces de aportar
soluciones a los graves problemas causados por los potentados, pero
que los decrépitos caducos y mediocres prefieren asesinar o sumir en
la ignorancia.
Santos repudia que los pobres puedan formarse íntegramente en
humanidades. Para ellos son los “artes y oficios” tanto como la
milicia o la servidumbre. O sea, siempre lo manual o lo denigrante,
jamás lo intelectual.
Por su lado, los nuevos dueños del poder surgieron -y siguen
fortaleciéndose y apoderándose de países del tercer mundo, guiados por
el imperio usano y su doctrina neoliberal- a raíz de las enormes
fortunas adquiridas con el sucio tráfico de enterógenos, alucinógenos
o estupefacientes, prohibidos perversa y arbitrariamente, aprovechando
su poder adictivo y su necesidad atávica que aseguran una clientela
fiel y abundante.
En Colombia, Uribe es un megalómano que no se resigna a perder el
poder adquirido por los parapolíticos con métodos ruines, y que el
genial aristócrata, Juan Manuel Santos, supo birlarles tan
magistralmente metiéndose al corazón mismo de la cueva de criminales.
Ahora, sin aspavientos y sin dudas, va quedando claro que el destacado
gurú ha resultado siendo la ficha del astuto judío converso, quien
está sustrayendo de la parapolítica a los crédulos que pensaron que
Uribe era un redentor auténtico y que su proyecto político era serio y
capaz de proteger la patria de sus enemigos.
¿Me copias? Así preguntan los sicarios en “Medallo” para saber si
puedes seguir vivo. Te sometes o te mueres es la interpretación de la
lacónica pregunta expresada en germanismo actual.
Por eso, el gobierno no ataca a Uribe. Le ha “copiado”. Más bien
deja que sus pecados lo persigan, como a cualquier personaje de
Shakespeare, sin proporcionarle chivos expiatorios ni motivos de
queja.
Lo abandona sin decirlo, dejándolo en una soledad creciente. Así,
quienes fueron engañados por sus discursos ahora pueden comparar la
demagogia criminal con el respeto a la legalidad y la
institucionalidad acordadas a un alto costo por el pueblo en la
Constitución de 1991.
Y quienes lo ensalzaron mientras tuvo el poder (pero no son bandidos,
o son bandidos avisados) también pueden abandonarlo y hasta mostrarse
escandalizados a medida que la opinión pública se convence de que las
acusaciones que se le han hecho son verdaderas, y que sus violaciones
a la ley no son inventadas sino reales, abundantes y bastante graves.
Además, son una vieja costumbre suya que, hasta ahora, continúa
impune.
Eventualmente lo demuestra la detención de su amado Jorge Noguera
Cotes, de cuya supuesta honradez salió garante y a quien nombró como
su primer director del DAS para pagarle sus falsos atentados cuando
fue candidato presidencial. Con ellos adquirió prestigio como enemigo
radical de la guerrilla de las FARC, presunta autora de esas charadas
publicitarias.
Sin ser ningún enemigo del establecimiento, es lo que está haciendo
Santos, marcando un contraste que está cuestionando y erosionando la
parapolítica con sus métodos criminales, muy bien representados por el
soez bravucón de Salgar, tan marrullero, intrigante, mentiroso,
soberbio, peligroso, desalmado, traidor, desleal y vende patria.
No en vano, el chalán se esmeró por privilegiar, de sus tres huevitos,
el que lo delata como un huevón arrodillado superlativamente a los
plutócratas.
De ahí sus contratos de estabilidad tributaria y los enormes
privilegios concedidos a los grandes monopolios depredadores,
resueltos a convertir en desiertos nuestros sagrarios naturales.
2. Amenazas auténticas a la Vida
Es un propósito criminal que se disfraza de codicia pero cuya razón de
ser es la destrucción deliberada de la biosfera, como es evidente para
cualquiera que se tome el trabajo de mirar nuestra aterradora realidad
como especie.
Con consecuencias globales que no respetan fronteras, en todos los
países dependientes los gobernantes cipayos facilitan la privatización
y desnacionalización de las riquezas.
Esto conlleva la depredación de la naturaleza con el superior y,
presuntamente, intocable e incuestionable pretexto de ganar más en la
eterna disputa por ser el más rico en que viven enfrascados los
potentados.
Por eso, la ideología neoliberal -justificación teórica del consumismo
depredador tanto como del despojo de las mayorías a nombre de la libre
empresa pero en beneficio de grandes monopolios en manos de muy
exclusivos potentados que subyugan los países y saquean a su antojo
las riquezas comunes o “patrimonio público”- no respeta océanos,
glaciales, polos, páramos, bosques, manglares… Todo lo quiere destruir
rápida y abruptamente, causando el mayor daño posible.
Mientras tanto, distrae a la opinión pública con la alharaca del
calentamiento global. Ésta es paralela y afín en propósitos
perversos a la de la persecución al tabaco mediante la demonización de
los fumadores, convertidos en los enemigos públicos número uno por
obra de la publicidad tendenciosa que pretende exculpar a los
verdaderos culpables.
Con pruebas dramáticas, emocionales y sesgadas se quiere culpar a los
fumadores de los cánceres y las abundantes afecciones respiratorias,
entre otras más dolencias debidas a la contaminación creciente.
Realmente, éstas obedecen a la pésima calidad del aire que todos nos
vemos obligados a respirar por culpa de la conocida como “cultura del
petróleo” que, desgraciadamente recibió el estímulo de Ford con su
modelo T.
Desde entonces, a la contaminación producida por las chimeneas de las
fábricas accionadas por carbón se sumó la causada por el uso de
combustibles fósiles en los automotores.
En la actualidad, la amenaza incluye los agro combustibles empleados
con igual propósito y capaces de seguir aplazando indefinidamente la
reconversión energética radical fundada en las fuentes limpias,
versátiles y económicas de energía, ya suficientemente conocidas y
probadas.
Todos ellos, acertadamente, han sido denominados necro combustibles o
combustibles de la muerte. Sin duda, son más dañinos que el
cigarrillo, aunque los no fumadores no se den cuenta porque no
reflexionan al respecto.
Con tales argucias, los grandes depredadores quieren ocultar sus
mortales ofensivas contra el medio ambiente y la Vida.
De ahí la necesidad de detener definitivamente las agresiones letales
de la gran minería, entre otras igualmente depredadoras cocinadas por
los grandes enemigos comunes, absolutamente corrompidos y resueltos a
adelantar el exterminio más pavoroso que la Humanidad haya presenciado
en todo su periplo en la Tierra.
Se trata de un reto definitivo que superará la época de las sociedades
jerárquicas -típicas y mayoritarias en la Historia-, para instaurar la
sociedad plana de ámbito necesariamente global.
Este reto dará al traste con la Historia, si se impone la razón de las
mayorías, o con la Vida significativa para los humanos, si los
potentados logran consolidar su Nuevo Orden Mundial.
Ese es el dilema fundamental de las generaciones vivas: perecer con la
moribunda Historia o instaurar la Nueva Era.
3. Balbuceos de materialismo histórico
El ámbito de la sociedad que remplace la Historia e inaugure la Nueva
Era (independientemente de cómo se vaya a denominar al fin), es
mundial.
Así la soñaba Marx en su concepción personal del socialismo, tan
alejada de lo que se ha hecho pasar en la Historia como tal mediante
el socialismo o comunismo en un solo país.
Por eso hablaba de revolución mundial, rechazando las revoluciones
nacionales, pues también reconocía el carácter mundial de la
burguesía, el mismo que reclamaba para el proletariado, esa clase
–imprescindible entonces por su papel fundamental en la producción-
que, suponía, remplazaría a aquella.
Y se burlaba de quienes buscaban el caudillo de la Comuna de Paris en
1871. Sin duda, era un anarquista que respetaba el principio de la
igualdad esencial de todos los humanos. De ahí su apoyo a Paul
Lafargue, su yerno, autor de “El derecho a la pereza” y representante
en España de la Internacional Comunista.
Su sociedad avanzada, propia de un nuevo modo de producción regido por
unas relaciones sociales superiores, partía de la igualdad, la
libertad y la fraternidad como realidades cotidianas, y las
garantizaba mediante la socialización de los medios de producción.
O sea, despojaba de recursos artificiales de poder a los ambiciosos
resueltos a violar los tres principios básicos del liberalismo
doctrinario en un ejercicio miserable del individualismo que, privado
del falso poder que dan la violencia y el dinero, no dejaba de
confirmar que nadie es más ni menos que nadie.
En consecuencia, todos merecemos vivir como dioses, ejerciendo
plenamente un sano individualismo, pues éste es una conquista de la
civilización que a todos nos debe llegar, como todas las demás cuando
el socialismo sea sensato y de verdad.
Otra cosa es que el desarrollo de las fuerzas productivas, como
resultado de la aplicación del cerebro en vez del músculo, está a
punto de eliminar al obrero o proletario como factor de producción,
para descargar esas tareas en robots. Es la liberación de la bíblica
maldición del trabajo.
Se logrará si antes somos capaces de vencer el dominio de los peores
criminales, los humanos involucionados que conservan sus cerebros
reptilianos con sus ansias de violencia y sangre.
Es fundamental librarnos de esos sicópatas enamorados del poder y las
riquezas tanto como carentes absolutamente de valores morales y
resueltos a precipitar la gran catástrofe, que tan adelantada llevan y
pueden culminar, si no nos oponemos y logramos impedirla.
4. Lacayos ejemplares
Santos -a quien no pueden tildar de “terrorista”, tanto por su origen
social y tradición política e ideológica como porque a nombre del
furibismo ha logrado los mayores logros militares contra las FARC- ha
demostrado que es capaz de acoger y respetar las reglas del juego que
la sociedad se dio en un inusitado ejercicio democrático en 1991.
Mediante éste remplazó la constitución aristocrática impuesta
abusivamente por Rafael Nuñez en 1886 para derogar la más sublime
constitución que han disfrutado los colombianos, la de Rionegro,
Antioquia, de 1863. Bajo su égida el país vivió sus tiempos más
prósperos y envidiados.
En cambio, Uribe manipuló toda la legalidad a su favor,
descaradamente, sin respeto a los conciudadanos ni a la comunidad
internacional. La Humanidad lo sabe y no lo perdonará.
Ya el Washington Post destaca las diferencias entre ambos lacayos, y
prefiere apoyar a Santos porque es más racional y ecuánime. Lo
considera más confiable por ser una ficha destacada de la oligarquía
tradicional.
Goza de buena aceptación internacional porque respeta las reglas sin
negarse a servirles a los potentados como se lo ordenen. Pero a los
verdaderos potentados, no a títeres ni a impostores. En particular,
recién electo presidente de Colombia, su visita a Netanyahu, en vez de
al lacayo Obama, confirmó su buen sentido para las derechas
internacionales empeñadas en superar la crisis mediante la guerra,
contando con cipayos fieles.
En cambio, después de despreciar como candidato al mestizo incapaz,
farsante y manoseado, Uribe sí reverenció a Obama , habiendo apoyado a
McCain inicialmente, buscando la aprobación del TLC con USA que
autorice y legalice todos los despojos de nuestras riquezas
contratados por el vende patria de Salgar.
Pronto, muchos exigirán castigo para los impresionantes crímenes de la
dictadura mafiosa y neoliberal que impusieron abiertamente José
Obdulio y su títere grosero y mal geniado, Álvaro Uribe Vélez,
auténtico guache con apariencia de seminarista pobre y alma de
culebrero enredador y estafador.
Uribe sigue disputándose con el asnal Aznar y el arrodillado Oscar
Arias la condición del lacayo más fiel al sionismo y a la ultraderecha
guerrerista y depredadora. Ninguno quiere descansar tras sus
mandatos. Su ambición se los impide, tanto como su temor a rendirle
cuentas a la Justicia.
5. Desafío mundial de sionistas
La desmesura de la pareja fascista colombiana de típicos lacayos
gobernantes de países dependientes ha estado acorde con la del idiota
Bush, su mentor, también granjero y todavía impune, pero reo ante la
Humanidad, la Vida y el Planeta, al menos para la gente decente,
conciente, digna e independiente.
Es bueno saberlo y repetirlo hasta que paguen sus crímenes. La
conservación de la Vida lo exige. Es una demanda perentoria de la
Justicia cuya culminación devolverá esperanzas de dignidad a la
especie humana abriéndole un futuro luminoso que le permita extenderse
por el Universo en términos de armonía y conocimiento, nunca más de
conquista.
Para tan magna labor faltan cerebros. Pero los maltusianos y los
eugenistas, en su perversidad e ineptitud, consideran que sobramos
seres humanos.
Por ende, con las mejores intenciones del mundo y guiados por su
superioridad ideológica y mental (tan falaces) han resuelto diezmar la
población hasta reducirla, bondadosamente, con el amor de los padres
protectores y lúcidos (pues insisten en considerarse mejores y más
bien dotados que cualquiera para guiar a los demás), a 500 millones de
esclavos. (Ver anexo Colombia para Todos. Noticias El Nuevo Orden
Mundial)
No podemos olvidar que los planes del club de Bilderberg siguen
adelante, aunque nadie dé la cara y sus socios continúen posando de
benefactores de la Humanidad, como Bill Gates, Ted Turner, David
Rockefeller, los Rotschild o los asquerosos Bush.
Su propósito es servirles a los 144.000 “justos” que irán en cuerpo y
alma al cielo tras el Juicio Universal que se esmeran en apurar. Para
ello buscan ansiosamente precipitar el tercer genocidio realmente
universal. A juicio de los sionistas, equivale a la tercera
reconstrucción del templo de Salomón dedicado al arbitrario Yahvé.
El desafío es para todos, y cada uno puede intervenir. Nadie tiene
derecho a suplantar a nadie. Consulta tu conciencia y tus intereses
(no sólo los inmediatos), sopésalos y resuelve siendo consciente de
las consecuencias de tu decisión.
Quizás no te interese prolongar la existencia de la especie en la
Tierra. O tal vez resuelvas luchar por derrotar a los demonios que
nos niegan el Paraíso que estamos a punto de conquistar si repudiamos
y derrotamos la Historia para inaugurar la Nueva Era. ¡Tú decides, y
debe ser pronto!
Tras 5.000 años oprimido, afrentado, humillado, despreciado,
explotado, esclavizado, perseguido y masacrado, llegó la hora de que
Esaú se libere de su hermano tramposo e impostor, como se lo prometió
Isaac después de impartirle su bendición espuria al impostor padre de
las doce tribus de genocidas perseguidores de los camitas, pero
enemigas declaradas de todas las formas de vida, de las que se
declaran únicos dueños legítimos.
Entre esas tribus cumplen un papel ideológico fundamental los hijos de
Leví, el vago que vive de los diezmos y produce y difunde el veneno
conceptual que fanatiza al “pueblo elegido”, como cabeza de la casta
sacerdotal al servicio del templo que Salomón construyó en honor de
Yahvé, acatando las promesas de David.
Es el fin de los despiadados y díscolos herederos de Jacob, no del
Mundo, como quieren los sionistas. Más bien, será el de estos
criminales sicóticos y obsesos, decididos a acabar con todo lo que
sostienen que les legó Yahvé. O sea, con el universo entero; y con lo
demás que vaya apareciendo, si es que algo queda adicional al Infierno
que se han construido y para el que tenemos que enviarlos rapidito.
Si somos, si despertamos, si nos amamos y amamos en vez de odiar, no
tiene que ser el fin del Mundo que han planeado los enemigos comunes.
La misma Biblia lo afirma: “llegará tiempo en que sacudirás su yugo, y
librarás de él tu cerviz”, como recompensa al engañado Esaú, modelo de
los ingenuos que han sido esclavos del tramposo Jacob, hasta ahora.
Si no los derrotamos –no lo olvidemos e insistamos en recordarlo,
repetirlo y difundirlo-, los descendientes del impostor Israel
desatarán la tercera guerra mundial que, para nuestra tragedia,
significaría la tercera reconstrucción del templo de Salomón, pues
representa la catástrofe bíblica relacionada con tal reconstrucción y
que tanto apasiona a los extremistas judíos (los sionistas).
Por eso, a cada uno le toca tomar partido a ver si es digno del futuro
luminoso que nos merecemos. No hay dudas de que estamos en
condiciones de imponerlo, si dejamos de creerles a los impostores y
nos sentimos tan hijos de Dios como cualquiera.
Si somos incapaces, veremos el fin del Mundo que añoran los asesinos
históricos más persistentes y fanatizados que ha conocido la
Humanidad, ahora desesperados por desatar la guerra mundial y
dedicados a arrasar con todo.
Ya hasta matan a los pájaros por bandadas, quizás con los mismos
químicos de los chemtrails con los cuales están idiotizando y
envenenando multitudes.
Es parte de ese deseo de exterminio que el club de Bilderberg tiene
como propósito fundamental para imponer su Paraíso de potentados,
propiamente conocido como el Infierno.
Es un designio que tantas víctimas humanas ha cobrado y que está
matando a los haitianos mediante el cólera, una infección intestinal
fácil de combatir con higiene y respeto por la Humanidad.
Si no reaccionamos impidiendo que los potentados se salgan con la
suya, haremos parte de las próximas víctimas, ya sea como muertos o
como esclavos.
La única salida posible es recuperar la soberanía individual y
despojar a los despojadores de las riquezas y el poder que se han
apropiado con marrrullas, violencias y mentiras.
El futuro es luminoso o no será. El aporte de cada uno es
fundamental para lograrlo.
Es cuestión de cada uno que nos importa y afecta a todos, de modo que
a todos nos incumbe resolverla de la mejor manera, como gente y no
como esclavos, sin discriminaciones ni imposiciones.
Quien quiera y tenga oídos para oír, que oiga. Quien tenga ojos para
ver, que vea. Pero que cada uno haga lo que quiera. Eso es libertad,
aunque bastante irresponsable si no se trata de una decisión
deliberada, consciente, sopesada y auténtica.
2011 AÑO DE LA SOLIDARIDAD
¡¡UN MUNDO MEJOR ES POSIBLE!!
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